Este domingo 21 de enero de 2024 fueron despedidos los restos mortales del ex alcalde curacano Luis Nolberto Curumilla Sotomayor.

El reconocido y querido ex jefe edilicio, que estuvo al mando de la comuna durante cinco períodos consecutivos, falleció el pasado viernes 19 de enero a los 75 años de edad en el Hospital Augusto Riffart de Castro. Su velatorio se realizó en su casa habitación en el sector Los Molinos.

“Hemos recibido una muy triste noticia: el fallecimiento de un gran líder, un gran ciudadano, un gran vecino, quien fue alcalde por cinco periodos en nuestra comuna. Sin lugar a duda, es una pena que nos embarga a toda nuestra comunidad, don Luis Curumilla Sotomayor dejó un legado que será imborrable, su alcaldía y sus períodos alcaldicios marcaron un antes y un después en nuestra comuna y nuestra comuna está en duelo comunal por esta irreparable pérdida, su legado va a quedar para siempre en nuestros corazones”, señaló la alcaldesa Javiera Yáñez tras conocer el deceso de la ex autoridad curacana.

Sumando que “su calidad humana siempre destacó a este gran servidor público y eso es algo imborrable para todos los vecinos y vecinas de Curaco de Vélez, esperando siempre paz y resignación para sus hijos, su señora y toda su familia que constantemente ha estado al servicio de la comuna de Curaco de Vélez”.

Previa a su ceremonia fúnebre se desarrolló una capilla ardiente frente al municipio curacano donde la Alcaldesa Javiera Yáñez, junto a autoridades locales, provinciales y regionales; funcionarios municipales, de la Corporación Municipal y Centro de Salud Familiar; dirigentes sociales, la comunidad en general e invitados brindaron un emotivo homenaje y último adiós a quien presidio la comuna por 20 años y que también fue paramédico y superintendente del Cuerpo de Bomberos, con diversas palabras y expresiones de cariño por su calidad humana y reconocimiento por su gestión municipal.  

Luego el féretro con el cuerpo de Curumilla Sotomayor (militante de la Democracia Cristiana) recibió los honores por parte del Cuerpo de Bomberos y después fue llevado hasta la iglesia San Judas Tadeo, donde se ofició una multitudinaria misa religiosa en su honor, la que fue encabezada por el párroco de Curaco de Vélez, presbítero Arturo Mansilla Guichacoy; más tarde fue trasladado y sepultado en el Cementerio Parroquial en compañía de sus familiares y la comunidad.