El Centro de Salud Familiar de Curaco de Vélez recibió 10 catres clínicos como donación de la Universidad de Chile.

Se trata de catres eléctricos, que como explicó Oriana Miranda, enfermera del CESFAM de Curaco de Vélez, son de muy buena calidad y representarán una ayuda fundamental a pacientes postrados y con problemas de movilidad.

“Siempre pensando en la posibilidad de que nuestros usuarios estén mejor, en especial los adultos que están postrados, teníamos la ilusión de que ojalá los que más lo necesitan por su inmovilidad pudieran estar un poco más cómodos y queríamos tener catres clínicos y se dio la oportunidad: conocimos a un médico de la Universidad de Chile, le contamos nuestra necesidad y nos ayudó a gestionar el aporte de estos 10 catres clínicos eléctricos para ser instalados en algunos domicilios, que van a ir rotando, pues va a ser un stock que nosotros vamos a tener por muchos años, pues son de muy buena calidad y los vamos a ir rotando entre nuestros usuarios”, explicó la enfermera del Centro de Salud Familiar de Curaco de Vélez, quien añadió que hasta ahora el centro asistencial contaba con sólo un catre clínico para toda la población de la comuna.

Oriana Miranda dijo que este equipamiento permite ayudar también a quienes cuidan a las personas postradas o con problemas de movilidad. “Al ser eléctrico permite que el paciente se pueda sentar solamente apretando un botón que está al lado del catre, o levantar los pies y esto no solamente ayuda al paciente, sino también a la persona que lo tiene que movilizar”.

La donación se gestionó a través de un médico y profesor de la Universidad de Chile, casa de estudios que hizo llegar el viernes pasado los 10 catres clínicos a Curaco de Vélez.